Jueves 21 de Mayo

LENGUA y 
CIENCIAS SOCIALES
TURURULANDIA
Te invito a conocer la historia que sucede en este cuento.
Vamos a compartir lo que sucede en un país llamado TURURULANDIA.
¿De qué crees que tratará la historia?

¿Cómo te imaginas la vida en Tururulandia?
Ahora sí, te presento la historia.
Cuentos con valores
Hoy: La libertad
   Tururulandia era un pequeño y precioso país de juguete que había hecho Paulina Perfectina. Paulina cuidaba constantemente Tururulandia para que todo estuviera en orden, y mantenía los muñecos rojos junto a sus casas rojas, y los niños verdes jugando en las hamacas del parque verde, y los papás hablando todo el día junto a la plaza y disfrutando el sol. Era un país tan bonito y perfecto, que Paulina soñaba con poder llegar a vivir un día en Tururulandia, su país imaginario.
   Y sin saber cómo ni por qué, su sueño se cumplió, y un día despertó en mitad de Tururulandia, vestida toda de rosa lista para ir a jugar al parque con sus amigos. ¡Qué maravilla!  ¡Todo era como ella soñaba! Y era realmente precioso.
   Paulina estaba totalmente feliz, corrió con todas sus ganas a las hamacas de los niños del parque verde, tenía muchas ganas de jugar allí. Pero antes de que pudiera llegar, una mano gigante la alcanzó, y tomándola de un brazo, la llevó de nuevo junto al gran palacio rosa. Paulina quedó un poco extrañada, pero enseguida lo olvidó, porque vio sus queridas casas rojas, y hacia allí se dirigió dispuesta a jugar en el parque rojo. Pero nuevamente, antes de llegar, la gran mano volvió a aparecer, y la volvió a dejar junto al palacio. Y le explicó que no podía salir cuando ella quería porque no en ese país no vivían en libertad. Sólo salían cuando tenían un permiso o una autorización para poder hacerlo.
No te esfuerces-dijo un niño que asomaba por una ventana de una casa vecina-
no podrás abandonar la zona rosa. No tenemos permitido salir de casa.

Entonces el niño le explicó a Paulina que nadie tenía la libertad de moverse con tranquilidad en Tururulandia y que aquel era el país más triste del mundo, porque no podían decidir qué hacer, ni siquiera los niños podían disfrutar de los parques. Y Paulina miró las caras de todos los niños que se asomaban en las ventanas de sus hogares y comprobó que era verdad. Y se dio cuenta de que aquel no era un mundo tan lindo cómo lo había imaginado.
- Si no podemos elegir qué hacemos o adónde vamos, ¿para qué nos sirve todo esto?- le dijeron todos los chicos del barrio - Si tan sólo tuviéramos un día para ver otras cosas... ¿no lo entiendes?. 
   Y vaya que lo entendió. Tras unos pocos días sin poder decidir nada por sí misma, ni moverse del castillo rosa, Paulina estaba profundamente triste; tanto, que su precioso país imaginario ya no lo importaba tanto.
   Hasta que una mañana, se despertó de nuevo en su vida normal, y al llegar junto a su país de juguete, lo primero que hizo fue mezclar colores, paisajes, personas para que cada uno pudiera elegir dónde ir y cómo vivir. Y así, cada vez que encontraba algo  fuera de su lugar, en vez de devolverla inmediatamente a su sitio, dejaba que todos sus juguetes estuvieran mezclados, disfrutando la libertad.
  Y muchas veces, en el colegio y en casa, trataron de explicarle en qué consistía la libertad, y lo importante que era. Pero no le hacía falta, para saber lo que era la libertad, sólo tenía que recordar la tristeza extrema que sintió aquellos días en Tururulandia.
Comprensión del cuento:
-¿Cómo era la vida en Tururulandia? ¿Por qué?
-¿Qué te imaginas que puede haber ocurrido en Tururulandia para que no vivan en libertad?
-¿Qué es la LIBERTAD para Paulina? ¿Y para vos? ¿Qué es? Puedes consultar con tu familia.
-Cuéntame por qué razón en estos días no podemos gozar de nuestra libertad.
-¿Por qué crees que la libertad es importante para las personas?
-¿Cómo dibujarías un sitio (una plaza, una calle, un lugar) disfrutando la libertad?
-Espero un hermoso dibujo que lo represente.